No dejes de caminar, escúchame pero sin dejar de andar. El rendirse nunca fue una opción y tú tienes fuerzas y valor para todo lo que pueda venir. Deja de pensar en el qué dirán los demás y en todas esas amenazas de futuro que aún están por inventar. Tienes una oportunidad, y no sabes si la volverás a tener así que, aprovéchala. Sigue escuchando y no mires hacia atrás. Lo que ya ha pasado no va a cambiar porque retrocedas, recuérdalo bien, tus pies dejan huella en cada paso que das. Hazte un tatuaje, un arma o una frase de guerra que te ayude a luchar. Todo lo que necesitas está sólo en ti y en ningún sitio más, no lo olvides. Cuando el miedo te atrape y no sepas qué hacer mira ese tatuaje, te ayudará a recordarlo. Camina sin parar y escucha lo más importante, busca que se esconde en tus ojos, la imagen que aparece cuando los cierras sin pensar. Inténtalo y se te dibujará una sonrisa que ni tú podrías explicar.
Hay textos con nombre propio.
2 comentarios:
pedazo de entrada :O es genial, tiene toda la razón del mundo! hay que vivir el día a día, lo pasado, pasado está, y no hay que perder el tiempo en arrepentirse:) un beso!
Pásate por mi blog y mira mi entrada llamada "John Boy" :)
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