Es indudable que lo que más excita las apetencias literarias del lector es saber que el autor ha sido encarcelado por sobreexcitar la libinosidad de millones de compatriotas. Groucho Marx.

miércoles, 1 de junio de 2011

No puedo hacer más si este más siempre resta.

Nunca jamás me sentí tan pequeña como el día en que ocupé tus sueños, esos de los ojos abiertos cuando el mundo aún estaba durmiendo, cuando el sol no quería salir porque había pasado la noche sin ti. Cualquiera diría que somos adictos al humo que sale de tus cigarrillos. Enciendo el cigarro con aquella estrella que arde a lo lejos porque hablan de ella en un universo infinito que cruza miradas que aquí no se mirarán nunca. Jugando desnudos nos tapaba un eclipse de luna, yo me sentía como una astronauta perdida en tus pecas, hacían que me olvidase de que sigo en la tierra. Hoy, tal vez no lo sepas, pero sigo bailando con otros planetas. Tendré que mirarte por un telescopio, buscar tu señal en la radio subida en la nave sin un copiloto que sepa cruzar el espacio, siguiendo la estela que deja el cometa que va donde digan tus labios. Me perdí en tu universo de noches fugaces y días extraños.

1 comentario:

Chelsea dijo...

Guau. :) bonitos juegos de palabras.
Espero que te choques algún día con la órbita de esa luna andante por casualidad, probablemente merezca la pena. :)

Venia a decirte que hace... bastante, me dejaste un comentario precioso, y intenté comentarte para darte las gracias, y decirte que me encantaron tus consejos y la idea de "calentarse el corazón y disfrutar de la ebullición", olvidando las promesas no-cumplidas. Pero blogger se volvió loco y no me dejo publicar el comentario, y entre que yo soy un desastre y los exámenes, olvidé venir a decirtelo ^^'

Así que, mejor tarde que nunca, gracias :)
Y un beso muy fuerte, chica-astronauta!