Es indudable que lo que más excita las apetencias literarias del lector es saber que el autor ha sido encarcelado por sobreexcitar la libinosidad de millones de compatriotas. Groucho Marx.

jueves, 5 de agosto de 2010

Mundo absurdo.

Normal que no entendamos nada en este mundo. En este mundo donde se trafica con rosas a la salida de misa, donde los príncipes de nuestros cuentos son siempre ninfómanos pero románticos a la vez, aquí las leyes las hacen escritores con esmoquin y corbata, esos que nunca han escrito una carta de amor.
Normal que ninguno entendamos las ganas que tengo de abrazarte hasta asfixiarte. Y darte mil besos, sintiendo los golpes de mi corazón en tu pecho, que a ti te falta el aire pero a mí me sobra y tus manos están enganchadas a mi cintura como mis manos lo están en tu nuca, haciendo que esté prohibido moverse.
Estoy rodeada de incoherencia, de noches de sol y mañanas en las que se ven las estrellas. Hay desorden en mi habitación, en mi cabeza y hasta en mis besos.
De vez en cuando así sonreímos, cuando perdemos la cabeza al burlarnos de este mundo.

1 comentario:

María Duque dijo...

no es dificil perder la cabeza en este mundo !